Precalentar el horno a 175º C. Engrasar una budinera de 20×10 cm con aceite de coco.
En un bol pequeño, mezclar la harina de almendra, coco rallado, bicarbonato de sodio y sal. Reservar.
Por otra parte, rallar la naranja y exprimir jugo. Si prefieres, puedes optar por usar los gajos completos.
En la jarra de la licuadora, colocar el jugo + ralladura de naranja, yemas de huevo, aceite de coco, miel de abeja, esencia de vainilla y avena. Licuar por 2 a 3 minutos o hasta que veas que te ha quedado una mezcla homogénea.
Con la ayuda de una espátula, mezclar los ingredientes húmedos con los secos; tener cuidado de no mezclar demasiado. Reservar.
Usando una batidora, batir las claras de huevo y jugo de limón a punto de nieve (hasta ver que las claras formen picos firmes). Agregar, en dos adiciones, las claras de huevo a la masa mezclando de manera envolvente con la espátula. Dividir la masa en partes iguales y mezclar el cacao en polvo con una mitad.
Comenzando con la masa de chocolate, verter una cucharada grande en la budinera. Ir alternando con la masa de vainilla, luego chocolate y así sucesivamente.
Hornear por 38-40 minutos o hasta que, al insertar un cuchillo en el medio, éste salga limpio.
Dejar enfriar el budín en su molde por 10 minutos. Luego, desmoldar y terminar de enfriar sobre una rejilla.